Este primer volumen de documentos reales abarca un marco cronológico que arranca en 1249, fecha del documento más antiguo conservado en el archivo monacal, y culmina en 1473, data, esta última, que coincide con los años finales del reinado de Enrique IV y el priorato de Catalina de Castilla, colofón, pues, a una etapa en la historia de Castilla y Santo Domingo el Real y preludio de otra, la de los Reyes Católicos, de importantes transformaciones políticas, sociales y culturales a las que no fue ajeno el monasterio toledano.