Cuando Billy Wilkinson, de 15 años, desaparece en mitad de la noche, su madre, Claire, se culpa a sí misma. No es la única en hacerlo. No hay un solo miembro de su familia que no se sienta culpable, y los Wilkinson están tan acostumbrados a guardar secretos entre ellos que la verdad no empieza a salir a la superficie hasta seis meses después.
Claire está segura de que sus amigos y su familia no tienen nada que ver con la desaparición. El instinto de una madre nunca se equivoca... ¿O sí?