¿Aquello era un secuestro... o una huida?
¿Qué iba a pensar la gente de ella? Después de todo, Jenny Eriksen había desaparecido de su propio baile de compromiso y ahora se encontraba atrapada junto a Luke McLintock, un hombre con una misión que cumplir y que la había separado de su novio... Además de robarle el corazón.
Luke McLintock no podía permitirse un fracaso. Bien era cierto que había secuestrado a la futura esposa de su amigo de juventud, pero lo había hecho solo porque Jenny era la pieza clave para el futuro de un pequeño muchacho. Con lo que no contaba era con que, a su lado, Jenny florecería olvidándose de todas las restricciones de las que había sido víctima. Entonces Luke empezó a preguntarse cómo iba a poder dejarla marchar...