Ya estaba hecho. Ella era su esposa. La esposa de un caballero silencioso y cauteloso al que todos apodaban “The Fog” (Niebla). Todo lo que lady Cathryn de Greneford había poseído alguna vez —castillo, tierras y gente— era ahora propiedad de él. Pero aún le quedaba algo por poseer…Existía un secreto oscuro tras los muros del castillo de Greneford, algo relacionado con su aparentemente obediente y silenciosa servil señora que todos guardaban celosamente. La traición que tanto temía William y que lo esperaba en su noche de bodas.Él había jurado tomar posesión de la propiedad que su rey le había concedido. Pero para lograrlo, primero tenía que conocer a la mujer, conocer sus secretos y acogerla de la forma más íntima y ancestral.