Eugenio Lafuente Corral es un hombre dedicado a su trabajo, de buen parecer y correctas maneras, cualquiera diría que es un ciudadano más. Pero Eugenio todo lo observa desde una perspectiva muy particular, perspectiva, quizá, deformada por la costumbre de ir más allá en la vida de los demás. Alto cargo de una Compañía de Seguros, es el encargado de dar trámite a informes con alto contenido personal sobre los beneficiarios de las pólizas. Lucía es uno de ellos, una prostituta procedente de la República Dominicana cuyo hermano ha fallecido en un accidente de tráfico. La empresa le deniega la prima del seguro de vida que contrató el familiar porque considera que no existen “garantías de que vaya a hacer un buen uso de la cantidad de dinero”. Su caso se suma a otros tantos de prostitutas, inmigrantes y personas sin recursos víctimas de un entramado de estafas. Una joven periodista en pleno proceso de embarazo está dispuesta a desentrañar este fraude en el que se ven implicados altos directivos, delegados y personalidades de la política. Eugenio conocerá a las dos mujeres en situaciones muy distintas pero con el mismo grado de intimidad. Daños personales es una novela directa, incisiva, sensual, en algunos casos, mordaz, donde las heridas se abren pero no se cierran.
- Capítulo 1
- Capítulo 2
- Capítulo 3
- Capítulo 4
- Capítulo 5
- Capítulo 6
- Capítulo 7
- Capítulo 8
- Capítulo 9
- Capítulo 10
- Capítulo 11
- Capítulo 12
- Capítulo 13
- Capítulo 14
- Capítulo 15
- Capítulo 16
- Capítulo 17
- Capítulo 18
- Capítulo 19
- Capítulo 20
- Capítulo 21
- Capítulo 22
- Capítulo 24
- Capítulo 25
- Capítulo 26
- Capítulo 27
- Capítulo 28
- Capítulo 29