Cuando viene un niño al mundo se trata, en primer lugar, de encontrarle un nombre, un problema que, en general, suscita en la familia una pequeña guerra sentimental. La madre está encantada de que, de pronto, todo el mundo se interese por su bebé, pero tampoco quiere que se decida en su lugar algo que tanto le concierne. Y tiene toda la razón: la elección del nombre tiene una importancia esencial para el niño. Esto es precisamente lo que viene a decirnos Pierre Le Rouzic en este libro divertido, instructivo y muy útil, en el que tienen cabida más de 5.000 nombres. Sin lugar a dudas, existen vínculos secretos entre el carácter de una persona y el nombre que lleva. El nombre incluso puede actuar en cierta medida sobre su personalidad, por no hablar de su destino. Esto nos conduce a reflexionar en el momento de realizar la elección. Así pues, ¿cuáles son los principales rasgos de carácter que tienen en común todos los «poseedores» de un mismo nombre? ¿Qué une a los Pablos, los Franciscos o las Marías? ¿Y a aquellos que se llaman Guillermo, Virginia o Inés? En estas páginas, el autor analiza de forma muy metódica los componentes de inteligencia, voluntad, afectividad o sociabilidad, por citar unos cuantos, que implica cada nombre. Un nombre para toda la vida constituye una guía indispensable que le permitirá elegir, con seriedad pero, sobre todo, con amor, «su» nombre, un atributo indisociable de la persona, que constituirá su rostro para toda la vida.