Pilar Máynez presenta una selección de los textos, extraídos de la Historia general de las cosas de Nueva España de fray Bernardino de Sahagún, sobre las fiestas, los rituales y las supersticiones de los antiguos mexicanos. Ante la imaginación del lector desfilarán la indumentaria de los participantes en las ceremonias, sus formas de abstinencia y los diferentes sacrificios que hacían cada mes. Asimismo se enterará de cómo concebían el universo los antiguos mexicanos y del destino que les deparaba el signo calendárico de su nacimiento. El pensamiento mágico y la profunda religiosidad de nuestros orígenes aparecen en este volumen.
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- Índice
- Introducción
- Libro Segundo. Que trata del calendario, fiestas y cer[e]monias, sacrificios y sol[em]nidades que estos naturales [de esta] Nueva España hacían a honra de sus dioses
- Prólogo
- Capítulo XX. De la fiesta y sacrificios que hacían en las calendas del primero mes, que se llamaba Atlcahualo o Cuahuitlehua
- Capítulo XXI. De las cer[e]monias y sacrificios que se hacían en el segundo mes, que se llamaba Tlacaxipehualiztli
- Capítulo XXII. De la fiesta y sacrificios que hacían en el postrero día del segundo mes, que se decía Tlacaxipehualiztli
- Capítulo XXIII. De la fiesta y cer[e]monias que hacían en las calendas del cuarto mes, que se llamaba Huei tozoztli
- Capítulo XXIV. De la fiesta [y sacrificio] que se hacía[n] en las calendas del quinto mes, que se llamaba Tóxcatl
- Capítulo XXV. De la fiesta y sacrificios que se hacían en las calendas del sexto mes, que se llamaba Etzalcualiztli
- Capítulo XXVI. De la fiesta y cer[e]monias que se hacían en las calendas del séptimo mes, que se nombraba Tecuilhuitontli
- Capítulo XXVII. De la fiesta y sacrificios que se hacían en las calendas del octavo mes, que se decía Huei tecuílhuitl
- Capítulo XXVIII. De la fiesta y sacrificios que se hacían en las calendas del nono mes, que se llamaba Tlaxuchimaco
- Capítulo XXIX. De la fiesta y sacrificios que se hacían en las calendas del décimo mes, que se llamaba Xócotl huetzi
- Capítulo XXX. De la fiesta y cer[e]monias que se hacían en las calendas del onceno mes, que se llamaba Ochpaniztli
- Capítulo XXXI. De la fiesta y sacrificios que hacían en las calendas del doceno mes, que se llamaba Teutleco
- Capítulo XXXII. De la fiesta y sacrificios que se hacían en las calendas del treceno mes, que se decía Tepeílhuitl
- Capítulo XXXIII. De la fiesta y sacrificios que se hacían en las calendas del catorceno mes, que se llamaba Quecholli
- Capítulo XXXIV. De la fiesta y sacrificios que se hacían en las calendas del quinceno mes, que se decía Panquetzaliztli
- Capítulo XXXV. De la fiesta y cer[e]monias que se hacían en las calendas del décimo sexto mes, que se llamaba Atemuztli
- Capítulo XXXVI. De la fiesta y sacrificios que se hacían en las calendas del décimo séptimo mes, que se llamaba Títitl
- Capítulo XXXVII. De la fiesta y cer[e]monias que se hacían en las calendas del décimo octavo mes, que se llamaba Izcalli
- Libro Cuarto. De la astrología judiciaria o arte de adivinar que estos mexicanos usaban para saber cuáles días eran bien afortunados y cuáles mal afortunados, y qué condiciones tendrían los que nacían en los días atribuidos a los caracteres o signos que aquí se ponen, y parece cosa de [nigromancia], que no de astrología
- Prólogo
- Capítulo II. Del segundo signo, llamado ce océlutl, y de la mala fortuna que tenían los que en él nacían, [así] hombres como mujeres, si con su buena diligencia no se remediaban. Los que en este signo nacían por la mayor parte eran esclavos
- Capítulo III. Del tercero signo, llamado ce mázatl, y de la buena fortuna que tenían los que en él nacían, [así] hombres como mujeres, si por su negligencia no la perdían
- Capítulo XIII. De[l] mal agüero que tomaban si alguno en este día tropezaba o se lastimaba en los pies, o caía, y de las malas condiciones de los que nacían en la octava casa, que se llama chicuei miquiztli, donde hay mucho lenguaje de los mal acondicionados, hombres o mujeres
- Capítulo XIV. De las postreras cuatro casas [de este] signo, las cuales tenían por dichosas, y de las buenas condiciones de los que en ellas nacían
- Capítulo XVI. Del noveno signo, llamado ce cóatl, y de su buena fortuna, si los que nacían en él no la perdiesen por su flo[j]ura. Los mercaderes tenían a este signo por muy propicio para su oficio
- Capítulo XVII. De la plática o razonamiento que uno de los viejos mercaderes hacía al que estaba de partida para ir a mercadear a provincias longincuas o e[x]trañas cuando era la primera vez
- Capítulo XVIII. De otro razonamiento que los m[i]smos hacían a los que ya otras veces habían ido le[j]os a mercadear
- Capítulo XIX. De las cer[e]monias que hacían los que quedaban por el que iba, si vivía, y otras cuando oían que era muerto
- Capítulo XXV. Del catorceno signo, llamado ce itzcuintli, y de su próspera ventura. Éste decían ser el signo del dios del fuego, llamado Xiuhtecuhtli o Tlalxictentica. En este signo los señoresy principales hacían gran fiesta a este dios. Y en este signo los señores y principales que eran elegidos para regir la república hacían la fiesta de su elección
- Capítulo XXVI. De cómo en este signo los señores se aparejaban para dar guerra a sus enemigos, y en el mismo sentenciaban a muerte a los que por algún gran crimen estaban presos
- Capítulo XXVII. Del quintodécimo signo, llamado ce calli, y de su muy adversa fortuna, decían que los hombres que en él nacían eran grandes ladrones, lu[j]uriosos, tahúres, desperdiciadores, y que siempre paraban en mal y las mujeres que en él nacían eran perezosas, dormilonas, inútiles para todo bien
- Capítulo XXVIII. De las malas condiciones de las mujeres que nacían en este signo
- Capítulo XXXI. Del signo decimoctavo [ce écatl] y de sus desgracias y de mala fortuna de los que en él nacían
- Capítulo XXXV. De las cer[e]monias que hacían cuando ba[u]tizaban la criatura, y del convite que hacían a los niños cuando les ponían el nombre. Y de la plática que los viejos hacían a la criatura y a la madre
- Capítulo XXXVII. De lo que a[h]ora se hace en los bateos, que es casi lo mismo que antiguamente hacían, y del modo de los banquetes que hacían los señores, principales y mercaderes, y a[h]ora hacen, y de las demás casas [de este] signo
- Cronología